En el colmo de la falta de cordura, el conflicto postelectoral en Jalisco lo generan los propios panistas.
Tras el descalabro de su partido, los problemas entre los grupos antagónicos del blanquiazul en la entidad se agudizaron.
El llamado a dirimir sus conflictos en casa, convocatoria hecha por el dirigente estatal, Eduardo Rosales Castellanos, fue ignorada por la corriente de panistas afines al gobernador Emilio González Márquez quienes se lanzaron a la calle a pedir la renovación total de la dirigencia.
Sin importarles crear conflictos viales y afectar el derecho de terceros, como tanto se lo critican a los perredistas y colocando en la antesala de la ingobernabilidad a la capital jalisciense, los panistas dan el peor de los espectáculos demostrando que mantener el poder es la única meta de los políticos.
Esto mientras el gobernador se encuentra ausente, pues atendiendo "asuntos importantes", viajó a la ciudad de México a manifestar su apoyo al ex dirigente nacional, Germán Martínez Cázares.
En los corrillos políticos se anuncia que González Márquez podría solicitar licencia como gobernador de Jalisco para convertirse en el nuevo dirigente nacional del blanquiazul, dejando de manera interina la administración estatal en manos del secretario general de gobierno, Fernando Guzmán Pérez Peláez.
Tras el descalabro de su partido, los problemas entre los grupos antagónicos del blanquiazul en la entidad se agudizaron.
El llamado a dirimir sus conflictos en casa, convocatoria hecha por el dirigente estatal, Eduardo Rosales Castellanos, fue ignorada por la corriente de panistas afines al gobernador Emilio González Márquez quienes se lanzaron a la calle a pedir la renovación total de la dirigencia.
Sin importarles crear conflictos viales y afectar el derecho de terceros, como tanto se lo critican a los perredistas y colocando en la antesala de la ingobernabilidad a la capital jalisciense, los panistas dan el peor de los espectáculos demostrando que mantener el poder es la única meta de los políticos.
Esto mientras el gobernador se encuentra ausente, pues atendiendo "asuntos importantes", viajó a la ciudad de México a manifestar su apoyo al ex dirigente nacional, Germán Martínez Cázares.
En los corrillos políticos se anuncia que González Márquez podría solicitar licencia como gobernador de Jalisco para convertirse en el nuevo dirigente nacional del blanquiazul, dejando de manera interina la administración estatal en manos del secretario general de gobierno, Fernando Guzmán Pérez Peláez.
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